Weblog de ciencia ficcion, terror y fantasia
Boris Karloff es uno de esos actores que con su mera presencia engrandecen una pelÃcula. De los que eclipsan al resto del reparto. Este actor inglés se curtió en el teatro antes de saltar al cine, y una vez allÃ, se asomó en más de medio centenar de pelÃculas mudas.
Hará unos años, haciendo zapping televisivo (constumbre que he perdido en la actualidad), hallé en un canal que no recuerdo un interesante documental en el que se ponÃa en entredicho la veracidad de las imágenes del aterrizaje y posterior paseo en la Luna de 1969.
De clásicos se pueden tildar estos sacapuntas reproduciendo las cabezas de los inolvidables monstruos de Universal. Son de 1963.
¿Se imaginan nuestro planeta devastado por los muertos vivientes?. ¿Y España entera, como reaccionarÃamos ante la irrupción de esos seres sin alma, pero con hambre insaciable?.
En los años 80, Ghana vivió una bonanza cinematográfica con la aparición del VHS, además de la llegada de proyectores, bobinas y pantallas blancas. Era el cine ambulante, que casi se habÃa extinguido en el continente africano.
A los 62 años de edad nos deja Stan Winston, maestro de los efectos especiales y maquillaje de Hollywood.
Uno de los nombres más conocidos del mundillo (junto al de Rick Baker) y laureados. Su creación más celebrada es el alienÃgena de Depredador (Predator, 1986).
El 16 de Enero de 1950, nacÃa en Windsor, Inglaterra, esta belleza de penetrantes ojos negros. Pelo negro, piernas largas, seguramente serÃa la envidia de sus compañeras del colegio católico al que asistió, situado en Rottingdean (cerca Brighton) donde se habÃa trasladado a vivir con su familia. No exageramos ensalzando su virtuosa belleza, no. Las pruebas están en que ganó el premio «Rostro del año» del rotativo británico The Evening News, y asà dio su pequeño salto a la popularidad.
En fase de preparación se encuentra la pelÃcula de El eternauta, con previsiones de estreno para el 2010.
La historieta de 1957 por Héctor Germán Oesterheld y Francisco Solano López es una lectura absorbente, interesantÃsima. Una obra maestra de la ciencia ficción, en formato cómic. Desde su minucioso y estructurado guión narrado en primera persona, hasta el diseño de los invasores, tenebrosos, y la ambientación: localizaciones de Buenos Aires perfectamente retratadas por el pincel de Solano López.
En Argentina llegó a ser tan popular, que aparte de sus secuelas de inferior calidad y todo tipo de reediciones, fue incluido en los colegios como lectura obligatoria.
Seguir leyendo «El dÃa que nevó en Buenos Aires»
Pues es Eric Stoltz. Robert Zemeckis comenzó a rodar Regreso al futuro (Back to the future, 1985) con este actor haciendo de Marty McFly, pero siempre tuvo en la cabeza a Michael J. Fox, que por entonces protagonizaba la serie semanal Enredos de familia, y le era imposible compatibilizar fechas. Nada contento con el trabajo de Stoltz, el director pudo convencer a Michael J. Fox para que se incorporase al proyecto, aunque ello le supusiera trabajar en jornadas maratonianas (de dÃa en la serie y de noche en la pelÃcula, esto entre semana. Luego los fines de semana rodaba las escenas diurnas del filme).
La cosa fue bien, taquillazo para la producción y fama para el actor. Eric, por su parte, se llevarÃa los elogios por su papel en Máscara (Mask, 1985) de Peter Bogdanovich, y el hombre no ha parado de trabajar hasta hoy en dÃa.
Todo este asunto hubiese quedado en un rumor de no haber sido por la aparición de las fotos del rodaje, que completan casi un tercio de la pelÃcula. Aquà están todas.
Hace unos años Sideshow collectibles adquirió las licencias de un puñado de pelÃculas clásicas de ciencia-ficción y terror. Como resultado de ello pusieron en el mercado figuras y bustos de gran calidad y detalle representando los monstruos más caracterÃsticos. Esta es la primera de una serie de entradas en las que daré cuenta de estos objetos, comenzando hoy por este busto tamaño real de Nosferatu, presentado de dos maneras, con o sin gorrito.
Hay que ser un poco masoca para adornar el salón con Max Schrek, pero, eso sÃ, espanta a las visitas molestas que da gusto.